Mis 7,90 euros

Buenas,

Se va uno de vacaciones la Semana Santa, y así, de tapadillo, han surgido reformas en el Gobierno en muchos ámbitos, entre los que está Cultura.

Sobre la nueva Ministra de Cultura, no voy a añadir nada. Son muchos los especialistas que se han pronunciado, llegando la Asociación de Internautas a pedir públicamente la recusación de la Ministra. Este es un tema que dará mucho que hablar, con lo que quien quiera estar al tanto, puede hacerlo a través de sus fuentes informativas habituales.

De lo que sí me gustaría opinar es sobre cultura y tecnología, no sobre política.

Eso que aparece en la imagen es el suplemento salmón de El Mundo de hoy domingo, y encima, un DVD original que me he comprado. Es una gran película, que me encanta, y que por tanto, he adquirido. Se llama La Batalla de las Árdenas, que narra la historia homónina, adquirida en Carrefour al módico precio de 7,90 euros.

Sí, señora González-Sinde, lamento decirle que en vez de ir a las salas a ver cine español (salvo raras excepciones bastante malo) prefiero gastarme los 7 u 8 euros en Carrefour, y llevarme a mi casa un DVD que puedo ver todas las veces que quiera, en varios idiomas y con sus subtítulos. Desgraciadamente, tengo que tragarme nada más meter el disco ese horrible spot contra la piratería que sus predecesores se han empeñado en añadir al material original, pero el buen cine bien merece invertir y sufrir los esperpentos de la maquinaria propagandística.

El cine español está de capa caída, pero no es por las redes P2P, sino porque en general es cine con poco gancho para el espectador. Si para ver un bodrio hay que gastarse 7 euros más las palomitas y la coca-cola, pues lo normal es que la gente no vaya a las salas. Así que dicho sea de paso, más dinero y ayudas a los parados, y menos al cine. El cine español, salvo contadas excepciones, sólo se sostiene por el dinero público, no por su calidad, con lo que lo natural es que muera, y que sólo sobrevivan las producciones que interesen al público y que sean rentables para los productores. Pero no nos culpe a nosotros de su escaso éxito, alegando que la gente no paga por ir a ver bodrios a las salas ya que descarga las películas en P2P. Quizás el problema es que las subvenciones superan a la recaudación, y habrá que preguntarse por qué sucede esto.

Esta lista de subvenciones debería ser recortada y mucho en estos tiempos de austeridad. Estamos en un período donde esperamos que los gobernantes administren adecuadamente el dinero que les damos tras pagar la sangría de impuestos que suponen el IRPF y los impuestos indirectos, entre otros, y yo particularmente no concibo normal que se dedique el dinero a financiar cine de escasa calidad que no es capaz de ser rentable por sí mismo.

Volviendo a la Batalla de las Ardenas, he decidido que me voy a grabar la película para poder visualizarla en mi ordenador sin tener que tener el disco original en la unidad. Ya he pagado a los autores, abonando el DVD original, y satisfaciendo el canon por copia privada en el DVD virgen que usaré para grabar la película. No termino de entender porqué tengo que pagar un canon si ya he pagado la película, pero bueno, todo sea por no ir en contra de la legalidad.

Espero que no se me haya olvidado nada y que nadie venga a la puerta de mi casa a acusarme de piratería. Y que no cunda el pánico, haré la copia sin ánimo de lucro y no iré a la boca del metro a venderla como hacen los manteros (a ver cuándo les damos la misma caña a ellos que a los usuarios de Internet, todo sea dicho)

Os habéis empeñado en ponerle puertas al campo, y mucho me temo que así no vamos a ir a ningún lado.